Conozca a los once jugadores de la que podría ser la mejor alineación hoy martes 14 de junio del 2022

Si usted ama el fútbol, hoy es un buen día para vivir intensamente esa pasión.

Póngase la camiseta roja, píntese la cara, luzca el sombrero tricolor, salga a la calle con la bandera de Costa Rica, suene la vuvuzela, emociónese y sienta la piel de gallina al cantar nuestro Himno Nacional, grite, cante, baile, salte…

No se reprima.

Si usted odia el balompié, esta es una jornada ideal para profundizar ese sentimiento.

Opine en familia, critique en Facebook, quéjese en Twitter, satirice en Youtube, repruebe en WhatsApp, murmure en el barrio, desapruebe en el bus, despelleje en la pulpería, desahóguese en la oficina, búrlese en la barbería, tilde en la cafetería…

No se autocensure.

Si a usted el llamado “deporte rey” le resulta indiferente, este martes será un día más.

Escuchará los gritos de los aficionados como si se tratara de un aguacero más, oirá las críticas de los detractores del fútbol como el ateo que asiste a un rezo, al mediodía se sentará a almorzar como siempre y quizá se la pase pensando única y exclusivamente en que mañana es día de pago.

No tiene porqué cambiar.

Al fin y al cabo, hoy es un buen día para que rueden el balón y el respeto; el primero, en el estadio de Catar donde las selecciones de Costa Rica y Nueva Zelanda disputarán el último cupo al Mundial del 2022; el segundo, en la cancha de la convivencia humana.

Cada quien es libre de alinear hoy las actitudes y emociones con las que más a gusto se sienta en relación con el fútbol, siempre y cuando la violencia ni siquiera se asome al camerino personal y el deseo de imponerle a otros los gustos propios, quede en clara posición fuera de juego.

Sí, este 14 de junio del 2022 es un buen día para permitir que estos once jugadores se luzcan sobre la gramilla de la vida: respeto, estima, cortesía, consideración, tolerancia, aceptación, deferencia, armonía, entendimiento, interacción y avenencia.

Y, por aquello de los cambios, en el banquillo quedan comprensión, transigencia, equilibrio, diversidad, fraternidad y amistad.

El fútbol debe ser siempre una buena excusa, o razón, para ejercitar el respeto a los gustos ajenos. Después de todo, nadie es superior a los demás por lo que piense de este deporte o por la forma con que lo vive.

José David Guevara Muñoz
Editor de Gente-diverGente
Periodista con 35 años de experiencia
Asesor en comunicación