Quizá los adultos nos complicamos buscando regalos que nuestros hijos no nos han pedido, cuando tal vez lo único que ellos quieren es que estemos cerca

Por Alejandro Guevara Muñoz

En estas fechas navideñas en casa buscamos los discos de Nochebuena y desde finales de noviembre esa música y letras llenan nuestro hogar. Algunos vecinos también nos dejan escuchar sus melodías alusivas a esta época. Además, las luces de colores también se hacen presentes y uno que otro arbolito decorado e iluminado se deja ver a través de las ventanas.

Hay una canción que de manera especial me invita a la reflexión. Se llama Caro Gesú Bambino (Querido Niño Jesús). Comparto una estrofa (adjunto la letra completa en el recuadro titulado Un canto de 61 años):

Querido Niño Jesús,
tú que eres tan bueno,
hazme este favor,
deja por una vez el cielo
y ven a jugar,
a jugar conmigo.

¿Qué me hace añorar esta letra, esta estrofa? Me gusta ese niño protagonista que siente la necesidad y confianza de hablar con el otro niño e invitarlo a jugar. Le dice deja ese cielo lejano, tal vez muy adulto, serio y religioso, y ven a jugar.

El niño quiere relacionarse frente a frente con el otro niño. La propuesta es simple, pero tan significativa; el niño quiere jugar, quiere un compa, un cómplice, ensuciarse, reír a carcajadas, ser niño.

Tal vez me complico buscando un regalo que mi hijo no me ha pedido, pero yo, lejano, creo o quiero creer que él lo necesita. Tal vez, reflexiono yo, solamente quiere que yo sea cercano, que me baje de esa estructura débil llamada adulto y que me acerque a él con todo el espíritu de un niño y juguemos: ser más cómplices en una mejenga, uno del Saprissa y el otro de la Liga, correr tras la bola, sudar, reír y después pasar a la pulpe y compartir un refresco.

Qué mejor regalo que salir a jugar.

Qué mejor regalo que ser cercanos.

Qué mejor regalo que descender e ir a jugar.

Feliz Navidad

Un canto de 61 años

Caro Gesú Bambino
Autores: P. Q. Carriaggi y P. Sofficci – 1960

Querido Niño Jesús,
tú que eres tan bueno,
hazme este favor,
deja por una vez el cielo
y ven a jugar
a jugar conmigo.
Tú sabes que papá es pobre
y que no tengo juguetes,
soy un niño bueno
como lo fuiste tú.
Verás, si puedes venir
que nos divertiremos incluso sin juguetes.
¡Ven Niño Jesús!
Querido Niño Jesús,
tú que eres tan bueno,
hazme este favor,
deja por una vez el cielo
y ven a jugar,
a jugar conmigo.
¡Niño Jesús!
¡Ven Niño Jesús!
¡Niño Jesús!

Alejandro Guevara Muñoz cuenta con más de 28 años de experiencia en temas de mercadeo, fundraising, desarrollo humano y comunitario, DDHH de la niñez, estrategia, sostenibilidad y Habilidades para la Vida.