Ensayo fotográfico en torno a una mujer que decide liberarse de las críticas sociales que le
impiden ser ella misma

Por Michelle Jiménez Rodríguez (*)

Si supieras el intenso dolor que me provocan esas rozaduras que afloran en mis pies cuando, al final del día, llego a casa y me quito los tacones.

Ni te imaginas cómo tengo el resto del cuerpo, en carne viva, desde que fui a que me hicieran la depilación láser y se les fue un poco la mano.

Además, si me pongo elegante, me asfixio, ya que apenas puedo respirar dentro de los vestidos.

El problema es que resulta casi imposible encontrar ropa de mi talla.

Aunque lo peor de todo, son las largas sesiones de maquillaje a las que necesito someterme antes de salir de casa, si quiero estar más o menos presentable.

Qué desesperación. Ya no sé qué más puedo hacer, lo he intentado todo.

(*) Michelle Jiménez Rodríguez estudia Tecnología de la imagen en la Universidad Técnica Nacional. Preparó este trabajo para el laboratorio digital 3.