Un recorrido histórico nos permite comprender las principales características del ser costarricense a lo largo de las últimas siete décadas

Por Eugenia Rodríguez Ugalde

Las personas que poseemos la nacionalidad costarricense nos sentimos orgullosas de nuestras raíces, de lo que caracteriza a nuestra propia cultura, de vivir en un país tan cálido en todo sentido y con tanta biodiversidad. Si tuviéramos que expresar con palabras qué sentimos al ser costarricenses, ¿Qué diríamos?

A lo largo de más de 70 años se han generado diversos documentos que recopilan la percepción de la ciudadanía costarricense con respecto a las principales características que la definen, en las coyunturas particulares de ese momento. Algunos de estos documentos hoy día los conocemos como los Idearios Costarricenses.

Al llegar al bicentenario de nuestra independencia, considero muy valioso recopilar en unas pocas líneas nuestras principales características como costarricenses. Para ello, se hará una síntesis de lo que expresan los Idearios Costarricenses, creados en los años 1943, 1977, 1993, 2001 y 2010 (Araya, 2016). Cada uno de estos documentos que promueven el diálogo social han recopilado la opinión de diversos ciudadanos que expresan sus percepciones en la coyuntura particular que están viviendo.

En 1943 se escribió el primer Ideario Costarricense. En esa época se vivía un gran cambio social relacionado con la creación del Seguro Social, el Código de Trabajo y el capítulo de la Constitución acerca de las garantías sociales, la eliminación del ejército y la nacionalización de la banca. Sin duda alguna, en esa época se caminó un gran trecho en relación con las garantías sociales de todas las personas ciudadanas del país. Eso generó un ambiente de estabilidad social, económica, política y democrática.

Si bien es cierto, en aquella época existían luchas sociales, se dio el fin del modelo económico oligárquico y se propuso un Estado social, que elevaba la conciencia en cuanto a los derechos de toda la ciudadanía y trataba de desdibujar las marcadas clases sociales.

En 1977 se hace una nueva propuesta de Ideario Costarricense, en el que se enfatizaron temas relacionados con la cultura, la infraestructura, la educación, la economía y la política. En este momento, el país se estaba enfrentando a una coyuntura en la que se debía preparar para la futura apertura comercial que se dio en las décadas de los 80 y 90.

En 1993, la Universidad Nacional y el Ministerio de Planificación convocaron a diversos grupos sociales para crear un nuevo Ideario Costarricense, que celebrara los 50 años de la creación del primero. Este ideario no menciona un cambio de época, pero sí enfatiza en la recesión económica que se estaba viviendo y en los grandes efectos que tenía sobre la ciudadanía.

“Creemos en una cultura de paz y no tenemos ejército”.

Con el inicio del nuevo milenio se propuso un nuevo Ideario Costarricense impulsado por la Universidad Estatal a Distancia, el cual se creó entre el 2000 y el 2001. Este documento no sólo recogió la información aportada por profesionales, sino que convocó a personas obreras, agricultoras, trabajadoras y estudiantes de todas las regiones del país.

En este documento se enfatizó la democracia como un elemento característico de la población costarricense, haciendo énfasis en el derecho y el deber del sufragio, proceso insigne de expresión popular y libertad de elección de toda la ciudadanía, confirmado en la Constitución Política de Costa Rica. Así, se afirma que “toda democracia debe basarse en el derecho inalienable del pueblo a elegir sus gobernantes con absoluta libertad, limpieza y efectividad” (Ideario costarricense, 2002, p. 26).

Una década después (2009-2010), la Universidad Nacional convocó nuevamente a personas de todas las regiones del país, de diversas clases sociales y niveles educativos.

Este ideario retrata el desvanecimiento del bipartidismo y el nacimiento de nuevas agrupaciones políticas, así como la apertura comercial a los tratados de Libre Comercio. También recoge opiniones de la gran mayoría de participantes con respecto a la preocupación por la crisis fiscal y la ineficiencia estatal.

Todo este recorrido histórico nos permite comprender las principales características del ser costarricense a lo largo de las últimas siete décadas y que se mantienen en la actualidad, las cuales se pueden resumir de la siguiente forma:

  • Vivimos en un país libre, independiente y soberano.
  • Valoramos enormemente la vivencia y la expresión de la libertad, a través de la comunicación, la ideología, la democracia. Tenemos libertad para vivir, pensar, reunirnos, agruparnos, escribir, hablar, creer, trasladarnos, elegir y ser elegido, disentir. Este es uno de los valores esenciales y más valorados del ser costarricense.
  • Contamos con servicios públicos de salud, lo que democratiza el acceso a este tipo de servicios.
  • Tenemos acceso a la educación pública en todos los niveles.
  • El país invierte en el sistema educativo costarricense un alto porcentaje de sus ingresos para asegurar el acceso a la educación por parte de toda la población.
  • Nuestro país cuenta con una gran riqueza en la biodiversidad y bellezas naturales. Nos sentimos orgullosos de ello y lo valoramos. Contamos con una política ambiental que protege nuestros recursos naturales.
  • Nos autodefinimos como demócratas. Abominamos toda forma de despotismo, totalitarismo y dictadura.
  • El Gobierno de la República es elegido de una manera popular, representativa y responsable, a través del sufragio, el cual es un deber y derecho de toda persona ciudadana.
  • Creemos en una cultura de paz y no tenemos ejército.
  • Como parte de nuestra idiosincrasia costarricense, vivimos los valores relacionados con la paz, la libertad, la solidaridad, la empatía y la hospitalidad.
  • Somos vigilantes de las garantías sociales y laborales, que se traduce en una legislación laboral que busca el cumplimiento de las garantías sociales, seguro social y pensión por invalidez, vejez y muerte para las personas trabajadoras.

Vivamos plenamente nuestros valores y reforcemos nuestra identidad costarricense para vivir armoniosamente en nuestra sociedad.

Referencias

Araya, F. (2016). Idearios en la evolución costarricense. Recuperado de: https://www.nacion.com/opinion/foros/los-idearios-en-la-evolucion-costarricense/KDSUMDZJCNGXRDEUUSUYBH3M6E/story/

UNED (2002). Ideario costarricense. Recuperado de: https://editorial.uned.ac.cr/book/U04322

Eugenia Rodríguez Ugalde es una profesional con formación académica en el campo de la psicología, psicopedagogía, administración educativa y pedagogía. Cuenta con más de 25 años de experiencia docente universitaria e investigación. Actualmente se desempeña como Vicerrectora de Bienestar Estudiantil y Extensión Universitaria en la Universidad Castro Carazo y es consultora nacional e internacional en temas educativos y de bienestar.