Lo que más disfruto de cada edición de Transitarte es entrar en contacto con personas creativas que luchan por hacer realidad sus sueños

José David Guevara Muñoz

Vinos, quesos, conservas…

Tanta gente talentosa, creativa, soñadora.

Pijamas, blusas, pantalonetas…

Eso es siempre Transitarte: una cita cara a cara con personas emprendedoras e innovadoras.

Guaraches, botas, sandalias…

La edición 2023 no fue la excepción. Conocí mujeres entusiastas, valientes, apasionadas.

Juegos de mesa, bisutería, encuadernación…

Conversé con hombres que imaginan, diseñan, producen.

Jabones, cremas, champús…

Refrescante y estimulante ver a muchachas pintando, esculpiendo, escribiendo.

Máscaras, canastos, bateas…

Inspirador saber de muchachos que abren sus propios talleres, tiendas, quioscos.

Lámparas, prensa libros, floreros…

Desafiante conocer las historias de familias que abandonaron la zona de confort.

Almohadones, tejidos, chocolates…

Un dulce sabor de energía escuchar a amigos que se asociaron para pensar fuera de la caja.

Alfajores, pan bon, cocadas…

No es cierto que “todo está perdido”. Hay comunidades que le abren espacios al arte.

Mascaradas, acuarelas, óleos…

Contamos en Costa Rica con colectivos que desafían, empoderan, vuelan.

Dibujos, caricaturas, camisetas…

Sí, hay asociaciones capacitando, enseñando, formando.

Fajas, collares para perros, vestidos de baño…

Frente a frente con quienes a diario transforman la materia. Sin intermediarios.

Bonsáis, maracas, espejos…

Se trata de Cecilia, Emilia, Rocío, Lucía, María, Teresa, Valeria, Sara, Alicia…

Espuma para afeitar de miel, medias, bufandas…

Se trata también de Carlos, Jorge, Roberto, Luis, Gonzalo, Manuel, Sergio, Alberto, Eduardo…

Gorros, viseras, helados artesanales…

Veo a las creadoras e imagino Dulcineas, Sherezades, Celestinas…

Maletines, billeteras, monederos, pañoletas…

Tantos Quijotes, Odiseos, Uvietas orgullosos de sus productos.

Maquillajes, chorreadores de café, vestidos…

Todo eso (y más) vi y pensé el sábado pasado cuando, ante una sugerencia de mi madre, Elizabeth, me di una vuelta por Transitarte 2023, en San José.

Un paseo refrescante y estimulante que me permitió entrar en contacto con muchas personas que, al igual que las hormigas, producen en silencio.

Valió la pena caminar desde el antiguo y demolido Cine California, hasta el renovado y florecido Parque Morazán.

¡Tanta gente talentosa que hay en nuestro país! ¡Tanta creatividad! ¡Tantos artistas!

Sí, para recuperar la esperanza en medio de tanta noticia negativa. Un hormiguero que deja roncha positiva.

José David Guevara Muñoz
Editor de Gente-diverGente